y se va....

Eran las ocho de la mañana bajaba las escaleras del edificio como un típico viernes. Al llegar al portal vi una sombra que estaba apoyada contra la puerta, no sabía quien era y tenía algo de miedo... Hasta que vi que se trataba de un niño puesto que traía mochila. Me acerqué e intenté abrir, el chico se apartó y me miró y sonrió. Y lo reconocí, yo también sonreí y le besé. Me preguntaba que hacía a estas horas alli, en mi portal nunca había venido, pero no me dejó preguntarselo y me dijo:

-Buenos días princesa, al levantarme se me ocurrió una idea maravillosa.

- Cuál?- Le pregunté llena de curiosidad y feliz.

- Pues que hoy, dejemos de pensar en lo que es correcto y lo que no, te parece?

- Claro!

- Bueno pues jurame, que sea lo que sea lo que te pronponga hoy, aceptes sin pensar en los consecuencias, es muy importante que te lo pienses pero date prisa.

- Claro, te lo juro!

- Bueno pues, se me ocurrió que podríamos pasar todo este día en Coruña, no era que nunca fueras? Pues mira visitariamos juntos la ciudad e iriamos a Fisterra donde dicen que es el fin del mundo, iriamos juntos. Quieres ir?

- Claro que quiero ir ! pero no tengo dinero, y no puedo volver arriba a por él que sospecharían..

- Si es por eso no te preocupes, ya te dije que lo pensé al despertarme y cogí todo el dinero que tengo para el tren, la comida y el bus, si nos hace falta.

- Oh, pues es maravilloso! - pensé un momento y dije- Pero espera, sujeta la puerta voy dejar mis libros aquí, en el cuarto de contadores para que no me pesen, llevas tu también los libros? Quieres dejarlos?

- Si es buena idea, gracias.

Y allá fuimos los dos, cogidos de la mano, juntos a una aventura. Aunque claro por el camino , me acordé de que tenía que avisar a mi amiga, que me esperaba para ir al colegio.

- Espera, podemos pasar un momento por la Ibense, es que le tengo que decir a Thais que no voy hoy al colegio y que no me espere.

- Si, te acompaño cielo.

Fuimos caminando en silencio hasta la ibense. Cuando Thais me vio acompañada se soprendió pero como no teníamos tiempo le dije:

- Thais, hoy no voy al colegio si te preguntan diles que no sabes nada porfavor, luego te cuento vale? Gracias.

- Si lo hago, pero cuentamelo luego vale? Chao.

- Si claro, chao.

Y nos despedimos de la mano. Continuamos Él y yo nuestro camino a la parada de bus, para ir a la estación de tren y coger ese tren que nos llevaría a Coruña esa ciudad a la cuál nunca había ido, a la cual en este viernes distintos a los demás iría, junto a él, a la persona que más quería en el mundo. Estaba pensando en el tema del dinero, y me preocupaba que se gastará tanto en mí, asi que, que le dije:

- Sabe? No me gusta nada que gastes dinero en mí, me gustaría que después cuando vuelva a casa devolverte todo el dinero, porfavor.

- No, de eso nada! Si te preocupa esa estupidez ya no vengas. Ese dinero es mío, y lo ahorré para usarlo cuando quiera y para lo que quiera. Ahora me apetece gastarlo en nosotros, porque no solo es en ti, tu y yo formamos un nosotros, no lo olvides.

Le cogí la mano y le sonreí, ya llegaba nuestro bus, el que nos iba llevar a ese lugar tan bonito.

Pasamos todo el viaje de Ourense Coruña, en silencio. Creo que dormí un poquito, estaba casanda durmiera poco y era muy temprano. Al llegar, le abrazé y fuimos caminando así juntos, abrazados. Se veía un cielo azul con algunas nubes, pero hacía mucho frío. Menos mal que ibamos abrigados los dos. Fuimos hasta el paseo maritimo y paseamos. Llegamos a la Torre de Hercules y miramos un buen rato. Fue todo muy bonito, precioso diría yo. Y llegó lo mas bonito de todo, Fisterra, el fin del mundo como me dijera a la mañana en el portal. Era mirar hacia abajo y no ver nada, estabamos a tal altura que no se veía nada excepto niebla. Parecía que solo existiamos nosotros dos, el y yo. Lo abrazé, me besó y le susuré:

- te quiero.

-Pues yo no..

- ah, no¿

- no, te amo.

- Tonto por un momrnto pensaba que no me querías ni nada.. yo también.

Y nos fuimos. Comimos sentados en un banco en un parque. Al acabar de comer recogimos las cosas y nos volvimos a sentar en el banco. me abrazó y nos quedamos así hasta la hora de irnos, llevabamos tanto tiempo alli que nos habiamos entumecido por culpa del frío, parecíamos patos mareados al andar, era muy gracioso. Dos patos mareados riendose de la mano. La spersonas nos miraban y sonreía. Si, deberiamos estar en casa haciendo los deberes, tendríamos que haber ido a clase, y qué? Éramos felices, no era suficiente? Para mi si. El trayecto de Coruña Ourense, fue silencioso también. Estabamos de la mano, y el parecía muy pensativo. Pero, en ese momento no pensé en nada malo. Supuse que estaría cansado, o cualquier otra cosa.

Al llegar me acopañó a casa, como siempre hacía cuando estabamos juntos. Pero esta vez, no sonrío, me miró con ojos serios, casi anhegados en lágrimas y me dijo:

- Tengo y necesito hablar contigo.

- Que pasa?

- Mi padre, se va a trabajar a USA y no nos volvermos aver.

Depronto no siento las piernas y lentamente me muevo como si me estuviera desmayando, meneo la cabeza y vuelvo a mi, el cielo no estaba oscuro por ser de noche sino muy temprano.ya noestaba a compañada en el portal estaba sola y con la mochila. Depronto miro para el portal y veo una sombra me siento estraña como si esto ya lo viviera, reconozco la sombra es thais, habro el portal y me dice..

-lo siento

-¿por?

- no seas tonta

-¿que?

-por irse

la lagrima cae lentamente por mi rostro